La IBEM (Intervención Breve Entrevista Motivacional) permite identificar el nivel de riesgo de los estudiantes frente al consumo.

Se busca: primero, identificar un problema con el consumo de esta sustancia, ya sea presente o latente, y segundo, motivar al individuo para que cambie su comportamiento, incrementando la motivación intrínseca para el cambio al explorar y resolver la ambivalencia.

La IBEM tiene tres momentos:

1) Detección y entrevista

2) Seguimiento

3) Seguimiento y cierre de proceso.

En el primer momento, después de diligenciar el Instrumento CAR/CARLOS (Pérez & Scopetta, 2011) los participantes asisten a una entrevista individual de 15 minutos con uno de los miembros del equipo profesional.

En este encuentro se establece con el joven una meta personal y unas estrategias basadas en la motivación al cambio y orientadas a la disminución o retraso de edad de inicio del consumo de alcohol.

Tres meses después de este encuentro se lleva a cabo el primer seguimiento, cuyo objetivo es analizar con el estudiante el cumplimiento o no de la meta establecida, haciendo énfasis en el rol de facilitadores como en el detectar dificultades y redes de apoyo.

En el tercer momento, tres meses después del anterior, inicia el segundo seguimiento y el cierre del proceso, esta etapa se centra en la ejecución o no de las metas a lo largo del tiempo, y se detectan tres perfiles.

Teniendo en cuenta criterios específicos, donde se potencializa a los jóvenes como facilitadores especializándolos en manejo de dificultades, análisis de la ambivalencia, y en búsqueda de refuerzos para dar continuidad a los procesos, entre otros factores.

De forma paralela la propuesta de trabajo incluye tres encuentros con los padres, con el fin de favorecer el cumplimiento de las metas establecidas por los jóvenes y promover que la familia se convierta en un factor protector frente al tema del consumo de sustancias psicoactivas.